Sus cuatro transductores diseñados a medida y que se adaptan perfectamente entre sí proporcionan una mayor claridad en los agudos, mientras que su revolucionario filtro paso bajo ofrece los graves de un auténtico subwoofer, sin sacrificar ni un solo detalle. Esta incomparable precisión auditiva se basa en décadas de perfeccionamiento. Por eso cada vez más músicos confían en Shure y sus auriculares levantan pasiones entre los audiófilos.